domingo, 3 de agosto de 2014

Ahora comprendo


Siempre ha sido mas fácil bombardear al mundo con críticas en vez de hacerlo con elogios. Es tan fácil hacer aquellas descargas con un universo que está más o igual de jodido que uno, pero cuando dejamos un poco de lado el egoísmo y las intenciones de captar solo lo que hay en la superficie de las personas, se hace posible la inducción a lo que podríamos denominar realidad.

Solo hoy pude comprender un poco mas a fondo la realidad de las personas que cometen suicidio. Comúnmente los suicidas son tachados como cobardes o locos, incluso enfermos. Yo creo que los suicidas no caben en ninguna de esas categorías, para mi los suicidas son personas desconformes con la vida que les tocó llevar, muchas veces me he sentido desconforme con mi vida y la he catalogado hasta como "vida injusta". Motivos he tenido de sobra para sentirme apestada y desmotivada, se me han agotado las energías muchas veces y hoy viendo el caso particular de un suicida, me di cuenta de que para esa persona la vida avanzaba muy lento y eso mismo le provocaba una severa incomodidad con el universo. A mi modo de ver las cosas los suicidas son personas cuyas piezas no encajan en el rompecabezas del que forman parte, es decir son piezas que pertenecen a otro lugar, son y se sienten como personas distintas, son personas que no conocen realmente el amor, ni el propio, ni el que se riega al exterior. Imagino cuan valientes son, pues a mi modo de ver las cosas han tenido que vivir sin este gran todo en sus vidas, de lo contrario sabrían que a pesar de lo malo existe algo grandioso que supera cualquier mal. 

Es fácil caer en desesperación y es terrible no encontrar ayuda a tiempo, creo que los suicidas no son realmente el problema, desde mi punto de vista lo son su entorno mas cercano, son las personas ensimismadas e incapaces de brindar ayuda a los potenciales suicidas que se encuentran a su alrededor. No existe, según mi perspectiva alguna persona que sólo busque llamar la atención por medio del suicidio, para ello se requeriría un extremo grado de estupidez y quiero dudar eternamente en cuanto a la existencia de alguna persona que piense de tal modo.

Los suicidas piensan en todo y en nada al mismo tiempo, sufren de una severa compulsión emotiva que no consigue ser canalizada de ninguna forma, son silenciosos sufrientes que no trasmiten su certera realidad. Ellos atraviesan por las capas de la agonía como si fuese el único camino para llegar a su destino fatal, desconocen la alegría, las endorfinas que genera ese espacio absoluto conocido como amor y no saben ni siquiera porque están presentes en este mundo, son extremistas dentro de su estilo de sufrimiento, no buscan la superficie que se encuentra en cada vacío, es mas, ni siquiera saben que existe, todo es oscuridad, todo es penumbra y a pesar de lo que hagan no encuentran jamás la conformidad. Sus pensamientos suelen ser negativos y las instancias que camuflan con emisiones positivas tan solo se mantienen vivas por un instante y no consiguen de algún modo tornarlas en felicidad.

No me dan lastima ni tristeza, no me son indiferentes y mucho menos me generan curiosidad, quizás un poco me desesperan porque no entiendo como consiguen vivir tantos años en oscuridad sin pensar que en algún momento la vida puede cambiar, o mejor dicho que en algún momento ellos la pueden cambiar. No consigo entender como nunca una sola persona cercana a ellos puede darse cuenta de lo que les sucede, como pueden estar rodeados de gente y al mismo tiempo en soledad.

Quitarse la vida es arrancarse las opciones, así nada mas, sin excusas ni motivos, es automáticamente convertiste en nada, y aunque todos los difuntos son masivamente mencionados en el instante en que las personas se enteran de su deceso, después de ello, automáticamente pasan a ser lo que siempre sintieron que eran... ¡NADA!.

Es posible que los suicidas consideren que no se están perdiendo de nada, puesto que la vida para ellos no tiene ningún sentido, es mas, sienten que estar vivo es una completa miseria y hay que acabar con ella lo mas pronto posible. Que vacío mas grande deben sentir, que miseria mas horrenda la que les hace pensar que no existe ni una mínima cosa por la que luchar, que falta de positivismo mas extrema y lo mas triste de todo esto, es que muchas veces esa sensación consume a estas almas en tiempos reducidos y acaba con ellas de sopetón.

No me cabe la menor duda de que a veces debemos dejar de ser tan egoístas y aunque cueste un poco, tratar de dejar a un lado la costumbre de estar ensimismados y cegarnos ante quienes piden ayuda sin acudir a las palabras.

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